Clara Aragón / MO
Los templos, por más pequeños y sencillos que estos sean, deben ser respetados, ya que son lugares consagrados y de encuentro con Dios, declaró el párroco de Nuestra Señora del Rosario, Rolando Caballero Navarro.
El padre mencionó lo anterior, después de que, durante el pasado fin de semana, la fachada de su parroquia fuera vandalizada y quedaran manchas de pintura roja justo a la entrada, actos realizados por jóvenes de unos 15 años de edad, que iban dirigidos a una novia.
Las manchas pueden limpiarse, pero no puede dejarse de lado la preocupación por el daño a este lugar, ya que parece que a la sociedad se le ha olvidado que se trata de espacios de oración.
Por esto, el padre Rolando hace el llamado a seguir inculcando el respeto, la educación y otros valores a los jóvenes y así prevenir que se involucren en actos de vandalismo, pues no sólo se trata del daño a los inmuebles, sino que hay acciones que podrían tener consecuencias legales.