Martín Alberto Mendoza / MO
Al menos un muerto y un lesionado, así como varios detenidos dejó un enfrentamiento entre presuntos sicarios y soldados del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional, en la colonia Cajeme.
El choque armado, se produjo poco después de las 20:40 horas, en calles Aquiles Serdán y Agustín Lara, frente a una tienda de autoservicio.
En ese sitio trascendió de manera extraoficial que quedó un individuo sin vida y otro más lesionado, luego de suscitarse un fuego cruzado.
El occiso quedó sobre la calle Antonio Valenzuela de la colonia San Antonio. Fue localizado por elementos de la Policía Estatal de Seguridad Pública.
Todo inició en calles Alfonso Esparza y Mariano Matamoros, cuando sujetos que abordaban dos vehículos abrieron fuego contra una vivienda.
Aunque primeramente se divulgó la versión que había un herido y supuestamente personas sin vida, pero al llegar autoridades descartaron lo anterior.
En ese punto solo se hallaron casquillos percutidos de pistola y fusiles de asalto, pero afortunadamente ninguna víctima.
Ahí iniciaron la persecución militares y guardias nacionales de los presuntos gatilleros que trataban de huir hacia el oriente.
Fue en calles Agustín Lara y Aquiles Serdán, dónde fueron interceptados y se generó el enfrentamiento.
Cómo resultado del fuego cruzado murió un sujeto no identificado y dos más resultaron heridos.
El último de los lesionados fue trasladado por paramédicos de Cruz Roja poco después de las 22:40 horas.
Ello después de que soldados, marinos y policías, descubrieron que estaba con vida.
El área donde se dió enfrentamiento congregó a casi un centenar de uniformados que ampliaron la zona resguardada con cintas restrictivas.
Hasta cerca de las 23:00 horas, el lugar permanecia delimitado, al trascender que había varios tipos detenidos.
Hasta el cierre de la edición, las investigaciones continuaban por parte de autoridades de los tres niveles de gobierno.
En ese punto también tenían asegurado un vehículo tipo pick up en el que se dicen viajaban los presuntos delincuentes.
Todo era hermetismo, al tiempo que personal de Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia del Estado realizaban las diligencias judiciales.