La histórica catedral de Notre Dame data del siglo XII y a lo largo de los años ha sido partícipe de los momentos más importantes de los parisinos. Sin embargo, un incendio el 15 de abril de 2019 le causó daños catastróficos al techo y a la aguja, los cuales colapsaron durante la primera hora debido a las grandes llamas.

A pesar de los esfuerzos de las autoridades, poco pudieron hacer para evitar la tragedia. No obstante, el Ministerio de Cultura de Francia actuó inmediatamente para realizar una inspección inicial y evaluar los daños provocados por el incendio.

De acuerdo a los informes, resultaron sin daño algunas obras de arte y reliquias como la corona de espinas de Jesús, un pedazo de la cruz donde fue crucificado, el órgano de Aristide Cavaillé-Coll, las estatuas de la Virgen de París y de los doce apóstoles, entre otros.

Después de la evaluación de los daños, lo primero que se realizó fueron los trabajos de seguridad, que duraron dieciocho meses, y los cuales consistieron en hacer un inventario de los daños y eliminar los peligros que amenazaban al monumento.

Luego continuaron los trabajos de reconstrucción y restauración que incluyen a más de 250 empresas y talleres franceses con artesanos, carpinteros, canteros, escultores, vidrieros, organeros, entre otros, dedicados a restaurar el esplendor de Notre Dame.

La reapertura de Notre Dame está planeada para llevarse a cabo el día 8 de diciembre de 2024, si es que el programa de restauración avanza conforme a lo planeado.

Cabe destacar que un día antes de la reapertura se realizará una apertura solemne de las puertas de la catedral en la que se bendecirá el órgano, el cual fue desmontado y montado en su totalidad.

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