En México, 7 de cada 10 mujeres privadas de su libertad sufrió de tortura, tratos crueles o degradantes, al menos en una etapa de su proceso, y de ellas 3 de cada 10 refirió haber sido víctima de tortura sexual.
La autoridad que más comete el delito son los policías de investigación en un 40 por ciento, seguidos por los municipales en un 20 por ciento y estatales en un 16 por ciento, en tanto, elementos de las fuerzas armadas (SEDENA y SEMAR) un 13 por ciento. Esto de acuerdo con el Diagnóstico Nacional sobre tortura sexual cometida contra mujeres privadas de libertad, dado a conocer este lunes por el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.
Digo que más allá de los datos y de las estadísticas que este diagnóstico arroja da cuenta de la verdad de un problema que existe en nuestro país, que no ha sido posible erradicar y que lamentablemente se presenta en todas las fases del proceso en que las mujeres expuestas a una condición de violación a la ley están expuestas”, agregó.
Según el documento, en nuestro país hasta noviembre del año pasado, cuando se elaboró el estudio, había 12 mil 625 mujeres privadas de su libertad distribuidas en 21 centros penitenciarios femeniles y 124 cárceles mixtas.
La muestra para el estudio se basó en mil 280 entrevistas e información proporcionada por fiscalías estatales, las comisiones de derechos humanos locales y la nacional, así como las comisiones ejecutivas de atención a víctimas y el Instituto Nacional de Migración.
De las conclusiones en este diagnóstico se van a encontrar 31 recomendaciones a 10 instituciones públicas que, más allá de que se tenga autonomía o no por parte de las fiscalías, deben ser atendidas como corresponde a una sentencia de la Corte, desde los temas básicos para que las fiscalías de los estados y la General de la República emprendan acciones penales contra los servidores públicos que han cometido estos ilícitos hasta la obligación de las fiscalías de garantizar que existan médicos legistas con perfil de género”, subrayó.