Redacción / MO
De acuerdo a un estudio desarrollado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), actualmente Sonora es uno de los estados con el mayor de zonas afectadas por pesticidas lo que daña seriamente la fauna y genera enfermedades.
Los 10 estados con más espacios contaminados por pesticidas son: Campeche, 19; Guerrero y Sinaloa, 16 cada uno; Chiapas, 11; Sonora, ocho; Estado de México y Morelos, seis respectivamente; Coahuila y Guanajuato, cinco casos en cada entidad.
“Todos los plaguicidas, hasta el más sencillo de ellos, representan un riesgo porque un plaguicida está hecho para matar algo”, advierte en entrevista el doctor en medio ambiente y desarrollo Arturo Gavilán García, director de investigación de Contaminantes, Sustancias, Residuos y Bioseguridad del INECC.
El experto y colaborador del diagnóstico enfatiza que desde que se lleva a cabo el registro de cualquier pesticida, ante la Secretaría de Salud, se tiene información sobre las características de peligrosidad de la molécula.
En el caso de los agrotóxicos, expone que cuando se liberan al ambiente hay sustancias químicas que reaccionan a la lluvia, al sol, al calor, etcétera y se degradan. Sin embargo, hay otras sustancias cuyas moléculas son mucho más resistentes y si se usan de una forma continua, como es el caso de los plaguicidas, se van acumulando, y tienen tiempos de vida que pueden ser más largos que otros.
Entre los casos más extremos menciona al DDT, “un plaguicida que puedes encontrarlo desde aplicaciones más de 10 años hacia atrás y todavía lo podemos medir en el ambiente porque es una molécula súper fuerte y no significa que lo estamos aplicando hoy, sino que es una molécula que cuando se liberó se queda contenida en el suelo o en algunos de los compartimientos del ambiente, sedimentos, en el agua”.