SIRIA. Las autoridades locales afiliadas a los kurdos en el norte de Siria anunciaron el descubrimiento de una fosa común con al menos 29 cuerpos, víctimas probablemente ejecutadas por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), según una ONG.
Al menos 29 cuerpos, entre los cuales los de una mujer y dos niños fueron encontrados en una fosa común” cerca del hotel Manbij, convertido en prisión por el EI durante su dominio entre 2014 y 2016, afirmó una fuente en el consejo local de Manbij, ciudad situada en la provincia de Alepo.
La fosa común fue descubierta el miércoles durante las obras realizadas por el municipio cerca del hotel, en el centro de la ciudad, según un comunicado del consejo militar de la ciudad.
Los cuerpos estaban descompuestos y algunos “tenían las manos atadas y los ojos vendados”, según la misma fuente.
Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), los restos recuperados pertenecían probablemente a personas secuestradas o detenidas por combatientes del EI.
La organización yihadista había tomado el control de Manbij a principios de 2014, antes de que las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), dominadas por los kurdos y apoyadas por Washington, consiguieran expulsarla de la región después de intensos combates en el verano boreal de 2016.