Dayan Lagarda
EL TIEMPO
Para poder agrandar el mosaico de siembras en el sur de Sonora, el Centro Experimental Norman E. Borlaug (Cenenb), mantiene siembras experimentales donde los expertos revisan el desarrollo y adaptación de diversos cultivos para poder llevarlos a la siembra comercial.
Dentro de las labranzas establecidas se encuentra la cebada, un cereal muy parecido al trigo y que sirve para la producción de cerveza, whisky, ginebra, pero también para pastas o sopas, teniendo un mercado amplio y atractivo para el productor.
Este cultivo también tiene como destino final el forraje, donde Sonora ocupó el primer lugar a nivel nacional durante el ciclo pasado con 58 mil 624 toneladas por encima de Hidalgo, Coahuila, Guanajuato y Jalisco.
Otra siembra que se mantiene bajo observación es la canola, una oleaginosa de invierno de flores color amarillo de la que se obtienen diferentes productos como grano para la industria del aceite comestible, producción de bio-diesel; vaina para pájaro, forraje para ganado y el quelite para consumo humano.
Expertos detallaron que se puede utilizar para la rotación de cultivos y es una alternativa en la producción de miel, así como como abono verde mejora la fertilidad de los suelos agotados a consecuencia del monocultivo y su forraje es de alto valor nutritivo para el ganado.