Dayan Lagarda / MO
La desmotivación entre los productores del Valle del Yaqui se agudiza ante la ausencia de precios de garantía y políticas que brinden certidumbre al sector, lo que se reflejará en una disminución en el área de siembra en el Valle del Yaqui.
Luis Cruz Carrillo, presidente de la Asociación de Organismos de Agricultores del Sur de Sonora (AOASS), advirtió que, a pesar de contar con suficiente recurso hídrico para establecer hasta 180 mil hectáreas en el ciclo, una parte significativa podría quedar sin sembrarse.
Estimó que serán alrededor de 50 mil hectáreas se quedarían fuera del ciclo agrícola, debido al desánimo que prevalece entre los productores. “Esa palomita se la va a llevar el secretario Julio Berdegué, una disminución de siembra a nivel nacional”, subrayó.
La situación también está afectando a los rentadores de tierras, quienes anteriormente podían obtener entre 10 y 11 mil pesos por hectárea, y hoy día, muchos optan por prestar las parcelas con tal de evitar que se enmonten.
Cruz Carrillo destacó que el impacto económico será considerable, pues a una hectárea se le invierte de 30 a 40 mil pesos, solo en preparación y siembra, más lo que se cosecha, reduciendo de manera directa los movimientos de capital en la región.
Además, resaltó que los organismos agrícolas se están debilitando ante este contexto adverso, haciéndose cada vez más chicos.


