Dayan Lagarda / MO
Ante la desaparición de la Financiera Rural, la actividad agropecuaria quedó en incertidumbre y la ganadería no fue la excepción, sobre todo en los pequeños productores, quienes no son aptos para entrar a programas de apoyo como muchos medianos o grandes ganaderos.
Julio Aldama Solís, presidente de la Asociación Ganadera Local (AGL) del Valle del Yaqui, señaló que será un gran revés para la actividad, pues mientras hay muchos financiamientos para el grande y mediano ganadero, realmente es nulo el apoyo para los pequeños.
Explicó que, los de pocas cabezas de ganado son los que más necesitan de recursos para poder sustentar su trabajo, pero con el anuncio del cierre de la Financiera, están ‘descabezando’ a estos productores pecuarios que con mucho esfuerzo siguen en la actividad.
Alertó que esto significa también un duro golpe a la economía, pues no existe el financiamiento siquiera de los bancos, quienes no autorizan créditos para el mediano ganadero, menos para los de una menor escala como es el caso.
A esto, también se le suma los problemas de sequía que están viviendo, así como los incendios en los ranchos, donde varios ganaderos resultaron afectados, perdiendo gran parte de estos o incluso su totalidad y solo toca valerse por sí mismos ante todos estos problemas.