Clara Aragón / Mo

Después de años de tener el proyecto de expandir el vivero de sangregado en el Mariposario Baisebolim Toosa, este 2022 esto se materializó, y se logró traspasar plantas y tras dos meses lograron arraigarse a su nuevo espacio, explicó Martin Ulises Sarabia.

El biólogo encargado del laboratorio y mariposario del centro cultural, mencionó que esto coincide con un incremento en la producción de capullo de mariposa cuatro espejos, con 243 capullos tan solo del 9 de agosto a la fecha, cuando en todo 2021 se lograron 556, pero no todos fueron útiles para la elaboración de tenabaris.

Explicó que fueron 70 plantas las que hace dos meses se colocaron en este nuevo espacio del mariposario, lo cual representó un trabajo difícil, pues tienen entre 4 a 5 años cada una y sus raíces ya se habían expandido.

Con esto se asegura el alimento para las más de 1,200 larvas de la mariposa que se han criado, 350 se encuentran tanto en el invernadero como en el laboratorio.

“Nosotros a veces tenemos problemas con la alimentación. alimentarlas no es tan fácil, una planta de quizás 2 metros se la llegan a comer hasta 10 larvas en toda su vida, entonces estamos ocupando muchas plantas”, dijo.

Los capullos de la mariposa cuatro espejos, son parte de la cultura viva de la región, pues se usan por Yaquis y Mayos para la elaboración de tenabaris, que se usan en las danzas tradicionales.

DATO
Más de 150 larvas y oruga de mariposa cuatro espejos se han donado a los mariposarios ubicados en Pótam, Belém y Tórim de 2021 a la fecha. 🐛🦋

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