Lorenza Sigala / MO
Integrantes de la comunidad indígena Seri se manifestaron este jueves a las afueras de Palacio de Gobierno para solicitar la intervención del Estado en la liberación de tres miembros de su Guardia Tradicional, detenidos desde el pasado 9 de marzo por presunta portación ilegal de armas.
Los manifestantes, encabezados por Enrique Robles Barnett, presidente del Consejo de Ancianos de la Nación Seri, demandaron apoyo directo del gobierno estatal, tras asegurar que las instituciones federales como el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y el CEDIS no han atendido sus peticiones.
“No venimos a crear controversia. Venimos a pedir apoyo. Estos jóvenes no son delincuentes, son guardias de nuestra tribu. Nos ayudan en la vigilancia, la pesca y en la organización de nuestras fiestas tradicionales”, declaró Robles Barnett.
Los detenidos fueron identificados como Edgar Ulises Torres Gastelo, Sergio Enrique Robles Gastelo y Marvin Eruviel Moreno Romero. De acuerdo con el testimonio del líder tradicional, los jóvenes se encontraban en Hermosillo realizando actividades relacionadas con la medicina tradicional del “sapo”, cuando fueron interceptados por autoridades en posesión de armas.
El Consejo de Ancianos sostuvo que los guardias están autorizados por usos y costumbres para portar armamento con fines de vigilancia comunitaria, por lo que consideran la detención como un acto de desconocimiento a los derechos indígenas.
Además de la exigencia de liberación, Robles Barnett abordó la disputa interna en la gobernanza de la tribu. Señaló que Jesús Félix Segovia ya no ostenta el cargo de gobernador tradicional, el cual ha sido conferido a Saúl Molina Romero, tras una ceremonia oficial celebrada en la comunidad.
“Jesús fue removido porque no respetaba el ecosistema de Isla del Tiburón. Permitió la entrada de cazadores que dañaron el medio ambiente. Nosotros, como pueblo indígena, respetamos profundamente a la naturaleza”, afirmó.
La manifestación fue pacífica y se mantuvo en diálogo con autoridades locales. Los miembros de la etnia expresaron su deseo de una pronta resolución, ya que la participación de los detenidos es clave para la organización de las próximas festividades tradicionales del pueblo Seri.